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De zona minera a Bosque del Pueblo entrevista a Alexis Massol Carmelo Ruiz Marrero / diciembre de 1998
La monoestrellada ondea sola en Casa Pueblo de Adjuntas. Esta antigua casona restaurada es testimonio tangible de que los grandes intereses no son invencibles. Comenzando en los 60, grandes empresas mineras, con el apoyo del gobierno de Puerto Rico, pretendieron explotar los grandes yacimientos minerales bajo Adjuntas, Utuado, Jayuya y Lares. "Eso está planchao", decían los cínicos entonces. Pero un movimiento popular y patriótico, iniciado por el Movimiento Pro Independencia, dió una lucha sin cuartel contra la minería, cuyo establecimiento en la montaña parecía para muchos inevitable. Los luchadores, que incluyeron religiosos, estudiantes, independentistas y ecologistas, se enfrentaron a todo: carpeteo, encubiertos infiltrados, las mentiras de seudocientíficos mercenarios, el abuso de una prensa amarillista y difamadora, bombas, y mucho más. Pero a fin de cuentas, el pueblo triunfó y demostró de manera contundente que un grupo de ciudadanos comprometidos pueden defender la ecología y la nación y prevalecer sobre el gran capital, aunque no tengan ni dinero ni poder político. El movimiento de oposición a la minería ha crecido y evolucionado a través de los años y hoy día es todo un proyecto de afirmación nacional, donde se unen la ecología y la cultura, se desarrollan alternativas económicas y se vive la filosofía hostosiana. Entrevistamos a Alexis Massol, activista adjunteño y miembro a tiempo completo del equipo de trabajo de Casa Pueblo, que también se conoce como el Taller de Arte y Cultura. La casona, antes propiedad de la familia Bianchi Mattei, tras un extenso trabajo de restauración ahora luce una librería, una biblioteca, un salón de actividades y una colección de antigüedades que incluye maquinillas, radios, herramientas y figuras religiosas de décadas pasadas. Massol tiene ahí una oficina, donde trabaja rodeado de afiches de Hostos y Roberto Clemente, donde hablamos sobre el pasado, presente y futuro de Casa Pueblo y la lucha contra la minería. "La línea nuestra es comunitaria", nos planteó Massol. "En vez de ser a través de un partido independentista, hicimos una lucha en donde se envolvió a la comunidad, en que participó el pueblo en su totalidad en la oposición a la explotación minera. Desarrollamos una lucha amplia, de distintos sectores, donde participaron los estudiantes, sectores religiosos, artistas, y otros grupos." "En el curso de la lucha antiminera nos damos cuenta de que la minería es parte de un modelo de desarrollo económico más amplio, del que la minería es sólo una parte. Armamos como piezas de un rompecabezas: el Plan 2020. Ahí está el desarrollo de la minería, el desarrollo de once superparques industriales para ubicar fábricas farmacéuticas y electrónicas, la construcción de infraestructura de carreteras a la zona central, y plantas de tratamiento regionales que se han ubicado en todo el país." ¿Qué proyectos tiene Casa Pueblo actualmente? "En esa lucha antiminera nos dimos cuenta de que no solamente la vida, la patria y la nación son recursos naturales, sino también que patria la componen muchas cosas adicionales." "Uno de nuestros principales proyectos es la finca Madre Isla, que tiene 5 cabañas rústicas. Ahí practicamos el desarrollo agrícola, mezclamos la agricultura con la ecología, la ecología con el trabajo voluntario, y el trabajo voluntario con un proyecto de autosuficiencia económica. Ahí vienen estudiantes de PR, de Estados Unidos de Alemania, se quedan ahí y dan trabajo voluntario." "Hemos aprendido que la vida, además de recursos naturales, cultura e idioma, necesita economía. Hemos estando desarrollando distintos proyectos y ampliando el concepto de lo que es una nación dentro de un proyecto comunitario. La misma nación habla a través de ese proyecto comunitario. Un proyecto que aprende, que se desarrolla, que tiene economía, una cultura liberadora, no una cultura enajenante. Es una operación económicamente autosustentable, dirigida a romper la dependencia." "Casa Pueblo tomó la iniciativa de hacer de la zona minera un bosque, lo cual logramos en 1996. También impulsamos que Casa Pueblo fuera el manejador comunitario de ese bosque, el Bosque del Pueblo. Por primera vez en la historia de este país una organización comunitaria asume el rol de manejar un bosque del estado." ¿Hubo problemas o resistencia por parte de las autoridades del gobierno a la propuesta del Bosque del Pueblo? "Cuando nosotros impulsamos el rescate de la tierra para transformarla en un bosque, en ese preciso momento la Southern Gold Resources tenía un permiso de exploración minera. Ellos llegaron a cuantificar científicamente los depósitos de minerales. Ahí está el yacimiento Calá Abajo y el de Piedra Hueca, que tienen más oro, cobre y plata que cualquier otro en Puerto Rico. Ya esa zona estaba separada para la minería. Realizamos una campaña bien estructurada, no improvisada. Ibamos a la zona minera y sembrábamos árboles e izábamos allí la bandera de Puerto Rico. Las compañías mineras al otro día quitaban los árboles y la bandera." "Una de las actividades más importantes que realizamos fue en 1995 una conferencia de prensa desde el cielo, a la que vino el canal 4 en helicóptero. 800 estudiantes de escuela superior escribieron con sus cuerpos NO MINAS. Y en 1996 hicimos otra manifestación-conferencia de prensa desde el cielo de los estudiantes en la que escribieron con sus cuerpos BOSQUE SI. Eso es otra forma en la que mucha gente habla a la vez en un solo idioma con una sola frase." "Una vez se puso fin al proyecto minero, el gobierno le puso de nombre al área Bosque de Las Vegas. Nosotros hicimos aquí una asamblea de niños. Antes de que vinieran a firmar la proclama del bosque, nosotros celebramos en agosto de 1996 aquí en Casa Pueblo una asamblea de niños, y vinieron doscientos. La asamblea fue dirigida por ellos mismos, donde se discutieron los por cuántos y los porqués. Aprobaron una resolución y lo bautizaron el Bosque del Pueblo. Y lo llamaron así porque era el pueblo de Puerto Rico el que por tantos años, desde los 60, había luchado por salvar esa tierra." "Cuando en septiembre de 1996 se firma la proclama del Bosque, aparece como el Bosque de Las Vegas. Y nosotros iniciamos una nueva campaña, que fue exitosa, para cambiar el nombre al Bosque del Pueblo." ¿Qué actividades se llevan a cabo en el Bosque del Pueblo actualmente? "Tenemos un consejo de manejo comunitario para el bosque, que tiene científicos, niños, profesores, estudiantes universitarios y distintas personas que han querido participar en el cuido del bosque. También hay una junta rectora del bosque donde hay miembros de la comunidad local y de la comunidad científica, porque el manejo del bosque tiene que ser un manejo adecuado y científicamente aceptable. Esa junta, en asociación con nosotros en Casa Pueblo, organizamos actividades en el bosque." "Nosotros combinamos siempre la ecología con la cultura. Nunca hacemos actividades de ecología y cultura separadas. Nuestra primera actividad consistió en rescatar un parque ceremonial indígena, que estaba sentado sobre el yacimiento Calá Abajo, que había sido saqueado en la zona minera precisamente para facilitar la minería. Y en los 70 sacaron ese parque ceremonial de ahí y lo ubicaron en la Universidad Católica de Ponce. Nuestra primera actividad en el bosque como manejadores fue rescatar esas raíces indígenas nuestras. Y nuestra primera actividad fue reubicar el parque en su lugar original en el Bosque del Pueblo. También ese día hubo una siembra de árboles, que incluyó árboles frutales y de café." ¿Puede la gente entrar al Bosque del Pueblo como si fuera otro lugar público más? ¿O hay reglas que regimentan el acceso? "Nosotros tenemos un control para el uso del bosque. Los grupos que visitan reciben primero una charla en Casa Pueblo acerca de todo el proceso histórico que condujo de las minas hacia el Bosque del Pueblo, para que tomen conciencia de que van a un lugar sagrado, como un altar de la patria." ¿Qué planes tiene Casa Pueblo para el futuro? "Nuestro primer plan es la reorganización y reestructuración de Casa Pueblo ante el siglo nuevo que viene, instalar acceso a Internet, computadoras, y crear un periódico regular. La casa la vamos a hacer autosuficiente en energía solar a partir de 1999. Ya tenemos técnicos voluntarios que están haciendo el diseño y amigos que aportarán para conseguir el equipo. En pocas palabras, queremos reestructurar la Casa Pueblo para hacerla más independiente y libre de lo que es ahora." ¿Cómo se financia Casa Pueblo? "Está el trabajo voluntario, que si se cuantificara tendría un valor de miles de dólares. Y recibimos donativos de equipo y de libros." "Pero la Casa Pueblo se sostiene principalmente a base de la venta del café Madre Isla. Es un café de alta calidad, de la variedad arábiga. No es un café solamente económico, sino que también es un café que lleva un mensaje, que sostiene una gestión comunitaria. Es un café solidario, con aroma a patria, y por lo tanto muy distinto. Además de tener un café de alta calidad, la gente se solidariza con el beneficio que da. Es un café social, cuyos beneficios se devuelven al pueblo, a través de actividades artísticas, culturales, y la biblioteca." "Nosotros lo envasamos en potes de cristal cuando aún está caliente. Y al ponerle la tapa se crea un vacío natural, un vacío ecológico. La gente devuelve los frascos después de usarlo para así nosotros reciclarlo." ¿Se ha planteado hacer del café Madre Isla uno orgánico, es decir sin el uso de pesticidas y otros químicos sintéticos? "Parte lo sembramos nosotros y otra parte se le compra a agricultores. Ya hemos tenido conversaciones para ver cómo se puede desarrollar una industria de café orgánico. El asunto no es muy sencillo, pero sí es parte de nuestros objetivos: desarrollar una línea de café orgánico. Ya hemos hablado con algunos agricultores dispuestos dispuestos a colaborar con Casa Pueblo en este asunto." ¿Basado en la experiencia de Casa Pueblo y el café Madre Isla, qué puede decir de la tésis esa de que en Puerto Rico no tenemos recursos naturales y que no podemos sostenernos sin ayuda de los americanos? "Nosotros podemos teorizar miles de cosas. Pero como dice el prócer José Martí, la mejor manera de decir es haciendo. Hemos hecho patente en la práctica que Puerto Rico puede autosostenerse. Este país puede hacer grandes adelantos y desarrollar múltiples proyectos que rompan la dependencia. Con el café Madre Isla, aquí hay una organización de autogestión comunitaria que es independiente económicamente, y que cada día que crece es más libre en su pensamiento." ¿Cómo figura la filosofía hostosiana en la gestión de Casa Pueblo? "Nosotros hemos estudiado a Hostos, y el pensamiento hostosiano está dentro de nuestro proyecto. Hostos plantea que hay que poner todo el entusiasmo y toda la voluntad en cada acto de la vida para ser hombres y mujeres libres. Estamos practicando a Hostos esa voluntad y esfuerzo, ya que Casa Pueblo no es un proyecto a tiempo parcial." "Hostos dice que hay que cimentar en la conciencia del pueblo puertorriqueño no solo el reclamar nuestros derechos sino también el asumir deberes y responsabilidades. Eso lo estamos haciedo aquí con el Bosque del Pueblo, que lo estamos manejando, manejando también una biblioteca y un centro de actividades. Estamos siendo hostosianos en la práctica." |